Es una terapia muy ancestral, donde el paciente siente el placer de experimentar la Energía Universal que el terapeuta le está transmitiendo a través de sus manos. A través de ir colocando las manos suavemente en diferentes partes específicas del cuerpo del paciente, la energía, que ingresa por el chakra coronario del terapeuta, y pasa a través de sus brazos hasta salir por sus manos con fuerza, con suavidad, con frío, con calor…… con la vibración exacta que el paciente necesita recibir. La energía en su sabiduría, va llegando a renovar, revitalizar, y armonizar todas aquellas áreas que la necesitan. En el Reiki el terapeuta va desarrollando mucha intuición y llega a ir sintiendo los bloqueos que su paciente tiene y eso ayuda para poder más adelante platicar sobre ellos. Por esta razón también ayuda a nuestro crecimiento personal y a la expansión de nuestra consciencia.